En el casco antiguo de Vilassar de Mar se ha proyectado este edificio entre medianeras, desarrollado en tres niveles que combinan un local gastronómico en la planta baja y una vivienda tipo dúplex en los niveles superiores, con accesos independientes desde la calle de Sant Ramon.

La planta baja alberga el espacio comercial, mientras que la primera planta acoge la zona de día de la vivienda, con una distribución funcional que incluye las estancias principales y una suite. En la planta bajo cubierta se configuran espacios abiertos y polivalentes que pueden funcionar como dormitorios o estudio, y que se abren a un solárium que aporta luz, intimidad y conexión visual con el exterior.

El edificio respeta la normativa del casco antiguo con una cubierta inclinada a dos aguas y una fachada austera y equilibrada, con aberturas que se adaptan a la composición del entorno. La fachada posterior se orienta en ángulo para mejorar la entrada de luz y ventilación, generando un patio interior clave para la calidad ambiental de la vivienda y del local, estableciendo una relación directa con el exterior.

El diseño interior maximiza el uso de una parcela estrecha y profunda, organizando los espacios en profundidad desde la fachada hasta el patio posterior, que se convierte en un elemento fundamental para la ventilación y la entrada de luz natural.

Desde el punto de vista constructivo, el edificio apuesta por materiales y soluciones eficientes y duraderas, integrándose con respeto en el contexto histórico y urbano del núcleo antiguo de Vilassar de Mar, combinando tradición y funcionalidad en una vivienda contemporánea.